Carrito
Entre sus beneficios, encontramos el mencionado respeto por el organismo humano y también por los sabores y aromas, que permanecen inalterados en conservas, zumos, aguas minerales y demás. Ello es debido a su misma composición, que resulta estable aunque varíen las temperaturas, algo que no ocurre con los materiales plásticos. Igualmente, no se descompone ni mezcla con los alimentos, como ocurre con la exposición a sustancias del estilo del bisfenol A o BPA, entre otros disruptores endocrinos.